Hulk necesita cambiar de familia por su salud. Tiene principios de displasia y no puede seguir viviendo en el que hasta ahora ha sido su hogar.
Se trata de un macho de Gran Danés de 11 meses.
Dulce, juguetón y cariñoso, puede llevar una vida normal con ciertas precauciones para no agravar su afección. Necesita vivir en un hogar sin escaleras y conscientes de los cuidados que necesita y de la fuerza que posee.