Rosi
Rosi tuvo una familia humana hasta que a los 7 años la perdió de forma repentina. ¡Ahora necesita un nuevo hogar!
Tamaño mediano/grande, nacida en 2016.
Llegó a nosotros después de que su humano con quien había estado desde cachorrita falleciera, terminando en el albergue. No quería comer ni beber debido a su tristeza.
Así que nos la trajimos con la familia ADA, y después de pasar un tiempo largo recibiendo los mimos de todos nuestros voluntarios, ahora vive en una casa de acogida a la espera de encontrar su familia definitiva.
Es una perra cariñosa que adora las largas caminatas, pero no le gustan mucho otros perros. Parece un poco arisca cuando la conoces pero después de un poco de tiempo la tienes panza arriba pidiendo mimos. Su comportamiento en casa es más que genial.
¿Quieres acariciar la barriguita de Rosi?
Sana, con vacunas y desparasitación al día, esterilizada y con chip.
Perros y niños, aunque mejor en la calle.
Sin otros perros, se lleva mejor con los humanos.
"Un país, una civilización se puede juzgar por la forma en que trata a sus animales."
Mahatma Gandhi (1869-1948)