En las cumbres de la isla hacemos lo posible por cuidar y alimentar a los perros abandonados allí, sobretodo podencos. Nuestro principal objetivo es sacarlos de allí y buscarles un hogar, para ello necesitamos donaciones en forma de pienso para poder alimentarles en lo que les sale una casa de acogida donde les enseñen que las manos están para dar cariño y que el ser humano no sólo es capaz de generar sufrimiento.
Durante y después de cada temporada de caza el número de podencos tirados a su suerte aumenta muchísimo. Existe la falsa creencia de que pueden sobrevivir abandonados en el campo pero no es así y tristemente lo hemos comprobado muy de cerca.
Si quieres colaborar, ponte en contacto con nosotros.